¿Es real el Infierno? ¿Podemos escaparnos del Infierno?
El infierno no tiene puerta de salida.
“Nadie puede vivir para siempre. Todos morirán. Nadie puede escapar del poder de la tumba.”
¿Es real el infierno? La Biblia nos habla acerca de dos lugares, el cielo y el infierno. Pasar la eternidad en el cielo o en el infierno es nuestra decisión. (Apocalipsis 22:17) El infierno no tiene una puerta de salida, y es el destino de todos aquellos que están sin Dios. (2 Tesalonicenses 1:8-10)
Solo Jesús nos puede salvar de ese destino. “Pues Dios amó tanto al mundo que dio a su único Hijo, para que todo el que crea en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.” (Juan 3:16)
Entonces, ¿qué es el infierno? Veamos aquí tres cosas que usted necesita saber acerca de lo que la Biblia dice del infierno:
1. ¿Cuál es la razón por la que Dios hizo el infierno?
¿Sabía usted que, una vez, hubo una guerra en el cielo dirigida por un ángel? Apocalipsis 12:7-9 dice, “Entonces hubo guerra en el cielo. Miguel y sus ángeles lucharon contra el dragón y sus ángeles. El dragón perdió la batalla, y él y sus ángeles fueron expulsados del cielo. Este gran dragón - la serpiente antigua llamada diablo o Satanás, el que engaña al mundo entero - fue lanzado a la tierra junto con todos sus ángeles.” Más adelante, Jesús advierte que los malvados que se olvidan de Dios (Salmo 9:17) y Su pueblo, irán al “fuego eterno preparado para el diablo y sus demonios.” (Mateo 25:41)
2. ¿Existe realmente el infierno?
En Lucas, leemos acerca de dos hombres. Uno pasa la eternidad en el infierno y el otro en el cielo. El hombre, cuyo nombre no se menciona, puso su fe en el dinero y se fue al infierno. Lázaro, puso su fe en Jesús y fue al cielo. “Con el tiempo, el hombre pobre murió, y los ángeles lo llevaron a estar con Abraham. El hombre rico también murió y fue enterrado, y su alma fue al lugar de los muertos. Allí, en medio del tormento, vio a Abraham a lo lejos con Lázaro junto a él.” (Lucas 16:22-23)
3. La misericordia de Dios nos salva del infierno.
El Señor no quiere que suframos en el infierno. “Pues Dios escogió salvarnos por medio de nuestro Señor Jesucristo y no derramar su enojo sobre nosotros.” (1 Tesalonicenses 5:9) En vez de eso, nos ofrece el regalo de la salvación, dándonos la oportunidad de estar con Él por siempre. “También comentan cómo ustedes esperan con ansias la venida, desde el cielo, del Hijo de Dios, Jesús, a quien Dios levantó de los muertos. Él es quien nos rescató de los horrores del juicio venidero.” (1 Tesalonicenses 1:10)
Ore esta semana:
Quiero ser un creyente en Jesucristo. Por favor ayúdame. En el nombre de Jesús, Amén.