La salvación cambia a las personas de adentro hacia afuera y cambia la forma en que ven la vida. Antes, ellos veían la vida como una para sí mismos, y ahora la ven como una viviendo para Dios.

"Él murió por todos para que los que reciben la nueva vida de Cristo ya no vivan más para sí mismos. Más bien, vivirán para Cristo, quien murió y resucitó por ellos." (2 Corintios 5:15)

Estas son dos perspectivas totalmente diferentes con dos resultados totalmente diferentes. Piense en ello simplemente como una manera de poder ver la vida de la manera en que Dios la ve. La Biblia es lo que Dios usa para revelar exactamente cómo Él piensa, por lo que mientras más tiempo pasamos en la Palabra de Dios, más comenzamos a comprender Sus expectativas de nuestra vida.

¿Es realmente importante para la vida cristiana el pasar el tiempo leyendo la Biblia?

Leer la Biblia es una parte muy importante de cómo un cristiano crece espiritualmente. Sería similar a cómo un bebé recién nacido crece. Se le alimenta con leche y a medida que crece, comienza a comer alimentos sólidos, y luego, a cierta edad cuando está más grande, puede comer cualquier cosa. Sin embargo, si nunca come, nunca crecerá. Lo mismo se aplica a los cristianos, cuanto más tiempo pasa el creyente en la Palabra de Dios, más crecerá espiritualmente. "Como bebés recién nacidos, deseen con ganas la leche espiritual pura para que crezcan..." (1 Pedro 2:2)

Jesús les dijo a sus discípulos que las palabras que les estaba hablando eran "espíritu y vida". Esa frase significa que Sus palabras fueron palabras espirituales que dieron vida y la transformaron.

Entonces, ¿cómo el Espíritu Santo usa la Palabra de Dios en la vida de un creyente?

Realmente es muy simple. La Biblia es el medio principal que Dios utiliza para enseñar a los creyentes. Cuanto más ellos aprenden lo que dice la Biblia y lo que significa, más el Espíritu Santo usará esas verdades para transformar sus vidas. Juan 17:17 lo expresa de esta manera: "Santifícalos en la verdad; tu palabra es la verdad."

Lo que dice este versículo es que la verdad de Dios es lo que Él utiliza para realmente cambiar a una persona. Esto es lo que Dios usa para enseñarnos y para transformar nuestra vida de tal manera que nos volvamos más y más como Su Hijo. Cuando leemos la Palabra, el Espíritu Santo comienza a enseñarnos la verdad que nunca antes habíamos conocido o comprendido y durante un período de tiempo esa verdad está internalizada en nosotros y al aplicarla a nuestra vida, comenzamos a cambiar.

¿Qué pasará si no puedo pasar un tiempo significativo en la Palabra de Dios?

Esa no es una pregunta fácil de responder porque algunos creyentes puede que ni siquiera tengan una Biblia. Una vez, cuando yo estaba en Zimbabue compartiendo a Jesús en una aldea en las áreas rurales, más de 170 personas recibieron a Cristo en un periodo de cinco días. Eso fue genial, pero había un problema: nadie tenía una Biblia. Por lo que, le di la Biblia extra que yo tenía a un hombre que había sido salvo. Él era la única persona en su aldea de unas 250 personas, que tenía una Biblia. En la mayoría de las partes del mundo, las personas si tienen acceso a la Palabra de Dios. Existen más copias de la Biblia en el mundo, que de cualquier otro libro. Generalmente, la razón principal por la cual las personas no pasan tiempo en la Palabra de Dios es porque están muy ocupadas con todo tipo de actividades en su vida y dejan de leer la Palabra de Dios. Muchos cristianos viven vidas tan ocupadas que simplemente sienten que no tienen suficiente tiempo para invertir en estudiar la Palabra de Dios, por lo que no lo hacen. Cuando eso sucede, suelen volver a sus antiguos hábitos, a cómo vivían antes de ser salvos.

Entonces, cuando se trata de estudiar la Palabra de Dios, ¿cuáles deberían ser mis metas?

El versículo bíblico para este estudio es Romanos 12:2 y dice lo siguiente:

No imiten las conductas ni las costumbres de este mundo, más bien dejen que Dios los transforme en personas nuevas al cambiarles la manera de pensar. Entonces aprenderán a conocer la voluntad de Dios para ustedes, la cual es buena, agradable y perfecta.

Debemos simplemente darnos cuenta de lo importante que es leer la Palabra de Dios para la vida cristiana. El campo de batalla siempre es la mente porque si el enemigo puede hacer que una persona piense mal, entonces éste sabe que vivirán mal. Eso es todo lo que éste quiere, que nosotros pensemos como él piensa. Él siempre está sembrando ideas falsas e impías en las mentes de las personas. Por lo tanto, si no tenemos la Palabra de Dios fuertemente impregnada en nuestra mente, lo más probable es que nos acojamos a algo que está claramente fuera de la voluntad de Dios para nuestra vida. Como un nuevo creyente, simplemente sea consistente en pasar tiempo en la Palabra de Dios y el Espíritu Santo continuará ayudándole a crecer de una manera que honre a Cristo.