Devocional Semanal

Viviendo Generosamente

Nos parecemos más a Dios cuando damos generosamente y sacrificialmente.

on 09/03/2014

“Porque tanto amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.”

Juan 3:16

“Dios amó tanto… que Él dio.” Esto nos describe el corazón generoso de Dios, y es un ejemplo para nosotros, Sus hijos. De hecho, nos parecemos más a Él cuando damos generosamente y sacrificialmente.

Dando Más Allá de lo Que Tenemos

En 2 Corintios 8:1-3, Pablo encomienda lo siguiente a los creyentes Macedonios: “En medio de una crisis muy severa, su gozo inmensurable y su extrema pobreza abundaron en rica generosidad.” Estos seguidores de Cristo no esperaron a estar estables o bien financieramente, dieron “más allá de lo que tenían.”

Haga el Bien y Comparta

¿Que le ha dado Dios para compartir? ¿Son sus bendiciones algo que puede compartir? La Biblia dice: “No se olviden de hacer el bien y de compartir con otros lo que tienen, porque ésos son los sacrificios que agradan a Dios. (Hebreos 13:16). Timoteo nos recuerda a los cristianos a que “usen su dinero para hacer el bien, que sean ricos en buenas obras, y generosos, dispuestos a compartir lo que tienen” (1 Timoteo 6:18).

Compartir generosamente con otros es una forma de “guardar tesoros en el cielo” (Mateo 6:20), y evita que la codicia y el egoísmo crezca en nuestros corazones.

Oremos para que algún día los seguidores de Jesús sean conocidos por su generosidad y amabilidad.

ORAR, INTERESARSE POR OTROS Y COMPARTIR A JESÚS

“Viviendo Generosamente”
Juan 3:16

¡Servimos un Dios increíblemente generoso! Esta característica de Dios está muy bien descrita en Juan 3:16 en donde Dios dio a su Hijo para que todo el que creyera en Él no perezca más tenga vida eterna. Porque la paga del pecado es muerte, pero el regalo gratis de Dios es vida eterna.

Le animamos a seguir a Jesús esta semana viviendo una vida generosa.

La generosidad es una actitud, significa “ser generoso,” ser una bendición para otros en todas las áreas. Usted tiene diferentes destrezas, dones, dinero, tiempo, conexiones o recursos físicos; tales como: un lugar donde puede hospedar. Y no se trata necesariamente de cubrir necesidades , pero de abrir el camino, facilitar las cosas – ¡ser una bendición!.

A medida que se ha ido desarrollando la Serie Orar, Interesarse por Otros y Compartir a Jesús durante las últimas semanas, usted ha aprendido a pedir la bendición de Dios sobre las personas que ve a diario, incluyendo los lugares a los que va y las cosas que usted hace diariamente. Usted también ha aprendido acerca del mandamiento de Jesús de amar y orar por sus enemigos y a ser embajadores de la reconciliación (2 Corintios 5:20). También vimos la importancia de mostrar aprecio hacia las personas que le rodean. Si desea leer artículos anteriores por favor vaya a este enlace.

¿Cuál es su posición? ¿Practica la generosidad? ¿Cree que puede crecer en esta área? La generosidad se trata de dar libremente sin esperar nada a cambio.


Ore esta semana:

Que Dios le de un corazón generoso a todos los creyentes.

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